Este pequeño nicho ubicado en la sala comedor de este apartamento familiar y utilizado inicialmente como espacio TV fue completamente repensado. Los clientes deseaban crear una oficina en casa cómoda que permitiera a su vez organizar documentos, libros y objetos decorativos en un máximo de almacenamiento. Se creó entonces un escritorio muy funcional iluminado por la luz proveniente de la fachada principal en vidrio y delimitando las funciones con un diseño de la carpintería compuesto por elementos horizontales como cubierta de trabajo, entrepaños que hacen de biblioteca, cajonería y un panel organizador de pared. La tonalidad gris marca este pequeño volumen central de este apartamento y delimita visualmente el gran espacio principal. El papel de colgadura trae dinamismo al conjunto. La iluminación fue pensada para crear un espacio agradable y acogedor.